Ha ofertado en su web sus cómics con un descuento del 15%, lo que ha provocado un revuelo de consideración entre distribuidores y libreros. Al margen de si es ético o legal (se hacen cosas similares en campos como las suscripciones con ofertas mayores), está el tema de que no conviene cabrear a aquellos de quienes dependes, ya que conozco pocas cosas peores que un librero enfadado –risas (es una forma figurada de hablar).
Pero lo cierto es que si las cosas fueran bien, Joseba no habría tenido que recurrir a este tipo de estrategias, fruto de buscar soluciones desesperadas a la situación actual.
Al final, por suerte, el agua no ha llegado al río.