Tengo todo lo acumulado a de ayer y la cosa no para, hay demasiadas cosas en marcha como para frenarlo más, y vamos con bastante retraso con el ‘Dolmen’.
Hoy he tenido la oportunidad de hablar con la vecina dueña del piso y decirle en persona lo de la marcha en un plazo de alrededor de un mes. Ha sido bastante triste ya que la mujer se ha lamentado de la circunstancia comentándome lo contenta que estaba de tenernos alquilados el piso.
Son momentos complicados ya que te vienen a la cabeza mil recuerdos, pero así es la vida. Es un gasto importante menos y hay que dejar los sentimientos de lado.