Álvaro Muñoz en primera persona. El autor de la obra testimonial APRENDE A VIVIR Y TRIUNFAR COMO DIBUJANTE PROFESIONAL escribe una introducción sobre su libro rojo del dibujante. Perfecto para cualquier profesional e ideal para los que quieran introducirse en la profesión.

A lo largo de la vida se cometen muchos errores. La mayoría por simple desconocimiento e inexperiencia. «¡Ah, si yo hubiese sabido entonces lo que sé ahora…!» es una frase recurrente según uno va cumpliendo años. Aprendemos las lecciones por el camino largo y duro.

Como muchos otros, yo he tenido mi ración de errores y aciertos. Ahora, tras 20 años dedicado a trabajos artísticos en el cómic, los storyboards y la ilustración, creo que puedo poner mi experiencia como profesional autónomo al servicio de ayudar a otros que empiezan o han perdido el rumbo.

Las profesiones artísticas no son un pasatiempo. No son solo «hacer dibujitos». Aun siendo trabajos creativos siguen siendo trabajo. Verlas de forma romántica e idealizada no ayuda. La parte creativa se disfruta mucho, pero no hay que descuidar la parte que es negocio, es decir, el dinero, las condiciones laborales, el mercado. Solo de ilusión no se vive. Hay que aprender a negociar buenas tarifas, rentabilizar tus creaciones, ofrecer productos atractivos para el mercado, promocionarlos bien, no autoexplotarse hasta perder la salud, aspirar a mejores condiciones laborales… en fin, desarrollar esa mentalidad empresarial que le falta a tantos artistas.

En el lado positivo las profesiones creativas son muy estimulantes. Usar la imaginación diariamente, lograr que tus proyectos personales salgan adelante, sentir que aportas algo valioso al mundo, sea una pizca de belleza o unos instantes de diversión a otras personas, se cuentan entre las grandes satisfacciones de la vida.

En las páginas de APRENDE A VIVIR Y TRIUNFAR COMO DIBUJANTE PROFESIONAL muestro las etapas y problemas habituales en el largo camino de los artistas desde que son estudiantes hasta que alcanzan el éxito. El objetivo es ahorrarte tropezones, facilitarte atajos y solventarte quebraderos de cabeza. También hacerte ver que no estás solo, que muchos de tus problemas son más comunes de lo que piensas, y que todos ellos tienen solución o se pueden prevenir.

No, no es imposible vivir del arte y dedicarse al trabajo de tus sueños. El camino puede ser largo, puedes encontrar meandros y bifurcaciones, puedes alterar el rumbo sobre la marcha o inventarte nuevos senderos nunca transitados.

En última instancia tú eres quien debe evaluar tus circunstancias y tomar tus decisiones solo, pero una pequeña ayuda nunca viene mal. Deseo que los consejos en este libro te sean útiles y faciliten tu camino hacia el éxito.

Sinceramente,

Álvaro Muñoz