Están cayendo como moscas: imprentas, distribuidores, editores, librerías… A este paso se va todo a la mierda. Esto me deja cada vez más claro que puede que lo suyo sea plegar velas durante un tiempo y ver qué sucede.
Hoy nos han llamado desde el Institut d’Estudis Balearics. Su presidente me ha confirmado su interés en un proyecto común y en la posibilidad de una coedición. No sería un mal momento para poder fortalecer vínculos, conozco ahora a bastante gente de allí y son bastante profesionales y en general gente bastante simpática en general. En el pasado nos han ayudado bastante con el tema del Salón del Comic de Barcelona y el tema del stand.
Por lo demás, espero que finalmente las previsiones no sean tan catastrofistas, aunque mucho me temo que puedan ser peores.