Jueves, 15 enero 2009: Más de bancos, esos grandísimos hijos de la gran madre (naturaleza)
Lo de los bancos está llegan a un punto patético. Hoy me han llamado para comentarme que tenía que ir a firmar un seguro para los 6500 euros de préstamo pedidos al BBVA. No sólo no les basta con que avale con mi nómina, la de mi mujer y con mi casa, sino que quieren que me asegure por si me pasa algo. He ido y por no dar mucho la lata y porque iba mal de tiempo para acabar el Dolmen 159 he firmado sin más, total, eran sólo 23 euros. El caso es que cuando me iba a ir me ha dicho que Nikole como avalista también debía de firmar un seguro, pero que en su caso debía de ser de vida, con una cuota mensual de 36 euros (o 350 si se pagaba de golpe), y que si se podría pasar un día para firmarlo. Aquello ya era demasiado, una cosa es pagar 23 euros que se los das casi por pena (para que la directorcilla pueda cubrir su cuota mensual de venta de este tipo de productos), y otra muy diferente que te quisieran sacar de forma regular 36 euros por si te queda inválido, te mueres o no sé qué cosas más (eso si, te dan 45.000 euros para disfrutar en la silla de ruedas o en el ataúd).
He ido y por no dar mucho la lata y porque iba mal de tiempo para acabar el Dolmen 159 he firmado sin más, total, eran sólo 23 euros. El caso es que cuando me iba a ir me ha dicho que Nikole como avalista también debía de firmar un seguro, pero que en su caso debía de ser de vida, con una cuota mensual de 36 euros (o 350 si se pagaba de golpe), y que si se podría pasar un día para firmarlo. Aquello ya era demasiado, una cosa es pagar 23 euros que se los das casi por pena (para que la directorcilla pueda cubrir su cuota mensual de venta de este tipo de productos), y otra muy diferente que te quisieran sacar de forma regular 36 euros por si te queda inválido, te mueres o no sé qué cosas más (eso si, te dan 45.000 euros para disfrutar en la silla de ruedas o en el ataúd).
Vamos, que he pasado. Le he dicho que me daba igual, que el préstamos ya estaba firmado y que como ya no lo podían echar a tras, que lo hubieran dicho antes. Y que tampoco firmaba mi seguro.
Es lamentable, pero desde que obligan a los directores de banco a vender seguros y cumplir con unos mínimos, los hay que te la intentan meter doblada. Al menos, en mi oficina de La Caixa no me vienen con argucias de este tipo; hace poco me pidieron algo parecido (un seguro médico privado desgravable), pero no pudo ser.
Ah, eso sí, me han clavado 494 euros de intereses por el descubierto que ellos mismos generaron al no renovarme la póliza.
En cuanto pueda me largo de este banco.
Nota histórica: Ya no trabajamos con ese banco y fue un gusto mandarlos a tomar viento.