Es una pasada su vitalidad y su forma de hacer las cosas. Trabaja para el IEB, institución encargada de la promoción exterior de los productos culturales de la isla, y es de esas raras personas que trabajan más allá de lo que se les exige y disfrutan con ello. La verdad es que estaba en todos sitios manejándose en el tema de la venta de derechos, promoción, etc.

El IEB tiene suerte de contar con gente como ella o su compañero Toni Planas, al que conozco desde hace muchos años y es igual que ella, gente interesada por la cultura y que disfruta trabajando.