He estado haciendo cuentas para ver qué le decía a Aleu, mi impresor en mi visita prevista a Barcelona de este miércoles, y finalmente habremos de cancelar el viaje para la semana que entra ya que veo que no tendría tiempo de acabar antes un par de cosas pendientes.
He decidido cambiar la fecha al lunes que viene, y ya de paso visitar a un distribuidor de librería generalista que nos han recomendando y que podría hacerlo mejor que nuestros distribuidores actuales, UDL, que no nos tratan con especial interés, y es que tal y como lo veo yo, esto es un camino de dos vías. Ellos son los suficientemente grandes como para seguir su camino sin necesitarnos, y aunque tenemos una cierta relación, profesionalmente no parecemos interesarles mucho ni hay mucho feedback (seguramente, en gran parte también porque nunca tenemos tiempo nosotros de descolgar el teléfono y hacer la llamada de cortesía de rigor, y viceversa)
Y por el tema de hacer números, un rollo absoluto. Desde luego es la parte menos gratificante de la historia.