El caso es que ha quedado de puta madre, para qué nos vamos a engañar. Es una de las obras de la que más orgulloso me siento de entre todas las que hemos publicado hasta el momento.
Hoy he visitado el lugar alternativo para cuando cerremos las oficinas actuales, tengo ganas de comenzar de nuevo, la etapa actual no lleva a ningún sitio y me gustará ver si con las nuevas medidas remontamos por fin, o de lo contrario estas notas que ahora escribo nunca verán la luz.
Mientras tanto, colea el tema de la persona a la que seguramente tendremos que despedir por ser tan aficionada a jugar al Facebook. Menudo fin de semana dándole vueltas al tema y pensando en que he debido de hacer mal para no haber sabido conducir esta situación que vista ahora, se veia venir desde lejos.
Sea como sea lo de cerrar el piso actual y mudarnos va cobrando forma en mi mente, y esa era la parte más complicada de todo este asunto. Aunque me costaría bastante tomar esa decisión en firme, son muchos años en este lugar y muchas, muchas, muchas las experiencias aquí vividas.
Nota histórica: Marcharnos de aquel lugar fue una de las decisiones más acertadas tomadas en todos estos años. No sólo por el ahorro que ha supuesto (de unos 15.000 euros anuales) sino por el ambiente actual que existe con Guillem March, Paco Díaz, Tolo y el resto de los presentes en el local que compartimos. Aunque cada uno seamos de nuestros padres y nuestras madres.