Hace dos años, jueves 8 agosto 2013. PD
He hecho de editor elevado a la máxima potencia. Di el ok a los derechos digitales de unas historias eróticas en Internet y durante un año apenas sacamos 50 euros con lo publicado; con la historia de este amigo hicimos 50 euros el primer mes y me dijo Dario “Dile algo porque como se entere luego sin que le avises se cabreará”.
Como no lo localicé en primera instancia lo dejé pasar. Ya se lo diré. Y ahí quedó la cosa. Los dos siguiente meses se hicieron otros 10 euros, poca cosa, pero el hecho era el hecho, seguía sin decirle nada.
Y al final, pues claro, se enteró, y no fue por mí.
Amistad quebrada un poco y dolor por todos lados.
Hacía tiempo que no me sentía así de mal. Y todo por no saber echar el freno y detener el reloj, la carrera, el puñetero día a día.
Mierda de trabajo.
Lo siento, PJones.