Voy a copiar un mail enviado justo hoy a dos colaboradores, con diferentes matices, ya que en estos casos odio enviar uno general a la gente:

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Hola,

Morir de éxito. En esas estamos.

No sé por dónde empezar de modo que vayamos por partes.

Tenemos un problema de liquidez.

Por un lado los bancos nos han recortado las líneas de descuento de pagarés, las pólizas de crédito, las tarjetas de crédito… Con la excusa de la crisis nos están recortando de por todo, y por si fuera poco, cualquier tipo de financiación es a un tipo de interés mucho más elevado de lo habitual. Lo que no ganan ahora con las hipotecas lo pagamos las empresas.

Nosotros, desde hace unos años, nos financiábamos descontando pagarés. Es decir, vendíamos en diciembre libros y el distribuidor en enero nos daba pagarés a 3 y 4 meses que nosotros descontábamos. Es decir, el banco nos adelantaba ese dinero a un tipo de 12-14% ya que llevaba timbres, intereses, estudios de la operación y demás imbecilidades.

Ahora, con el crecimiento de Dolmen la línea de descuento se nos ha quedado pequeña, muy pequeña, sobre todo tras la campaña de Navidad.

El caso es que tenemos sobre la mesa unos pagarés que el banco no puede o no quiere descontar.

El caso es que las líneas de descuento no se liberan un poco hasta el 28 de enero, momento en el que intentaremos ver cómo atender todo lo que se ha ido acumulando.

Estamos buscando nuevos bancos con los que trabajar y poder aumentar nuestra capacidad de trabajo, pero eso lleva un tiempo ya que han de presentarse mil papeles para poder recibir cualquier tipo de financiación.

No entraré en la gente que no nos paga y no nos responde, no citaré la crisis tampoco como excusa. No, la verdad es que las cosas nos están yendo bien dentro de lo que cabe. Desde hace un tiempo hemos mejorado en muchas cosas, desde el tema de prensa a la reducción de gastos u optimación del proceso. Culpa de ello es el haber aumentado la facturación mucho más allá de lo que nuestra financiación puede aceptar, sobre todo en las continuas circunstancias y condiciones cambiantes del banco, que no hacen sino desmontar una y otra vez cuanto hacemos.

El resumen de todo esto es que tenemos el dinero pero no la capacidad de acceder a él… De momento. Puede que esto se solvente en unos días o en una semana, pero se solucionará pronto.

Nuestra prioridad es encontrar un banco que nos permita descontar ese dinero que tenemos en papel y de esa forma atender los compromisos pendientes.

Nos estamos adaptando y saldremos adelante, por eso sólo te pido un poco de paciencia.

Seguramente hay en el mail repetición de conceptos, aliteraciones, errores gramaticales, redundancias… pero prefiero mandártelo cuanto antes y no revisar el tocho que veo me ha acabado saliendo.

Me paso el día haciendo cuentas y números, con lo que eso supone para mí que nunca me han acabado de gustar.

Aunque imagino que es obvio, no está de más decir lo mal que me sabe esta situación. Saldremos de esta.

Para cualquier duda, no dudes en escribirme.

Un abrazo

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NOTA HISTÓRICA: Quien iba a decir que la cosa iba a cambiar tanto en tan poco tiempo, y que íbamos a comenzar a trabajar con dos bancos (BBVA y Sabadell) que no tenían nada que ver con la experiencia que teníamos y que nos facilitarían tanto las cosas; de todas formas, tras 20 años he descubierto que al final se trata en muchos casos del director de oficina que te toca (han sido ya tantos los que hemos tenido).