Hace dos años, domingo 6 noviembre 2022
Como no sé si ya he dicho en alguna ocasión, las tres cosas que menos me gustan de este trabajo son:
1) No poder pagar a tiempo a la gente por cuestiones de liquidez
2) Ir a juicios
3) Despedir a gente.
A lo primero no se acostumbra uno, cuesta y te sientes que estás fallando a esa persona. Con los juicios he perdido la cuenta y es como las guerras, que cuanto eres veterano ya te cuesta menos ir (creo que van 7-8). Y a lo tercero parece que me voy acostumbrando, aunque sigue sin ser sencillo.
Esta semana ha tocado hacerlo de nuevo. El departamento de envíos hacía aguas desde hacía una temporada y tras varios avisos he tenido que hablar con la persona que lo llevaba. Hemos tenido varias charlas a lo largo de este último año, pero tiene la cabeza en otro sitio. Imagino que son cosas de su juventud, pero el caso es que no se podía seguir así. Me sabe mal porque es una persona cercana y comprometida con la empresa, pero estábamos quedando mal con demasiada gente. Es ese tipo de cosas que tienes que hacer por mucho que te pueda doler. Hemos hablado y hemos tomado la decisión mutua de dejarlo a final de mes. Creo que es lo mejor para ambas partes.
Por lo demás, el trabajo se acumula que da gusto. Este viernes mis hijos celebraban su 15 cumpleaños con los amigos y les he dejado la casa hasta las 2,00 de la madrugada, durante 5 horas que he aprovechado para ir a la oficina y adelantar trabajo. Pero no hay forma, no deja de acumularse. Espero que en el futuro la cosa mejore.
Uno de los problemas es el trabajo generado por errores como los de la persona de envíos o prensa. También he hablado con Toni de Comunicación al respecto y le he dicho que si seguimos así habrá que seguir el mismo camino. Y es una pena, porque es una persona con mucho potencial y ganas, y a la que tengo en gran estima personal. ¿Por qué falla? Ni idea, puede que porque no me sepa explicar a la hora de transmitirle lo que hacer. El caso es que estamos cometiendo demasiados errores en general: banners de presentaciones con datos erróneos, envíos que no se hacen, billetes de avión en días que no tocan, presentaciones que obras que deja sin llevar a cabo… Y eso no puede ser. Habrá que tomar decisiones.
Esta semana que entra toca la presentación en Madrid ante los medios del Guerrero del Antifaz y si seguimos así será un desastre. A ver qué tal. De momento, haré noche en Madrid en vez de regresar a Palma y me quedaré para arreglar algunas cosas, desconectar y ver el partido del Madrid del jueves noche.