Hace dos años, viernes 8 abril 2016
Se me ha estropeado el portátil y la semana ha sido una auténtica pesadilla.
Es domingo y estoy trabajando con un portátil que me he traído de la oficina a la espera de ver si mañana la cosa se arregla por fin, ya que la cosa se torció el miércoles y desde entonces… pues eso, a medio gas.
En el aspecto positivo, hemos tenido todo tipo de ingresos atípicos esta semana. Desde un crédito que ha habido que solicitar para cubrir pagos a corto plazo (20.000 euros) a una subvención y un pagaré de nuestro distribuidor en Sudamérica por los siguientes meses, que cubre lo que teníamos pendientes con ellos. En confidencia nos han comentado el motivo del problema económico que arrastraban, y por suerte es algo puntual que se solventará en breve.
Aparte de eso, con los dedos cruzados para ver si mañana, de una forma u otra, se arregla el tema del puñetero portátil.