Hace dos años, viernes 5 enero 2018
Deben haber sido las Navidades más relajadas de toda mi vida. He podido estar 15 días con mis hijos y trabajar solo a ratos.
Por suerte todo ha ido rodado y la maquinaria funciona y está engrasada. Así da gusto.
El lunes estará todo el equipo de regreso y comenzará todo el mundo con energías renovadas. Lo bueno es que, tal y como acabamos el año pasado, basta con seguir un poco la tónica y el camino trazado.
Además de ello, intentaré realmente encontrar el modo de poder dedicarme a dos proyectos que creo pueden acabar siendo puntales de esta empresa.