Esta semana he estado bastante contacto con Javier Cosnada. Al margen de que escribe bien, es un tipo estupendo. Creo que si trabajamos juntos podemos hacer que sus novelas funcionen realmente bien.
En la oficina hemos creado un nuevo plan de trabajo destinado a intentar no retrasarnos con las novedades. Hemos impreso el calendario físicamente de los próximos seis meses y señalado la fecha en que han de estar las novedades listas para ir a imprenta, y a partir de ahí planificado las entregas de colaboradores. Hasta el momento mucho de ese trabajo lo guardábamos en la cabeza, por lo que en ocasiones se nos pasaban cosas (es un ejercicio de memoria y habilidad interesante, pero en el fondo estresante; a pesar de que muchas cosas las tenemos anotadas en la agenda).