Hace dos años, viernes 19 febrero 2021
Qué de cosas por comentar. La verdad es que ha sido una de las semanas más emocionantes que recuerdo en toda la historia de la editorial. No paran de pasar cosas.
Por un lado, ya tenemos en marcha las novelas del Doctor Who. No sé qué tal funcionarán (quiero pensar que bien), pero como aficionado total de la serie desde hace algunos años, me enorgullece y satisface mucho el poder publicarlas. Además, Ignacio Echevarría me ha confirmado que podrá traducirlas. Es un crack, trabaja en el mundo del doblaje de series, y muy fan del personaje de Who. Ha costado más de tres años, pero por fin hemos logrado firmarlas.
Ya tenemos traducido El Don al inglés, ¡y rotulado! Por lo que en breve comenzaremos a mover el libro fuera para ver si vendemos los derechos.
Paqui se ha puesto por fin con el nuevo programa de contabilidad y facturación, que hará que vaya mucho mejor con todo el tema administrativo.
Darío tiene cerrada la producción de los próximos meses y, por primera vez, vamos adelantados en muchas semanas al calendario.
Dati no para de cerrar contratos, y ha contactado con una agencia de marketing que podrá impulsar mucho la promoción de Espiral. Además, Jorge Iván nos ha recomendado unas novelas para esa línea que pueden funcionar muy bien.
Neus está moviendo las redes a tope y coordinando a los autores y la prensa.
Isaac Sánchez, por su parte, va como un tiro con su nuevo proyecto. Tras El Don, se ha puesto una novela gráfica en toda regla que es brutal. Lo que meh contado me ha encantado y lo que he visto es sensacional. Creo que será su mejor obra de entre todas las que le hemos publicado.
Y lo mejor de lo mejor, lo increíble, el longhot que no pensé que pudiera salir. Estamos a un paso de cerrar la contratación de las aventuras de Esther, algo que nos redimensionaría. Es un proyecto a largo plazo porque hay que hacer mil cosas antes, y conviene hacerlas bien, pero tengo muchas ideas al respecto. Espero que dentro de dos años hayamos comenzado ya con ello.
El asunto surgió sin querer, pero parece que tenemos muchas posibilidades de sacarlo adelante. La semana que viene, explico la historia.
Nota histórica: En efecto, ya estamos con Esther a tope, aunque lo mejor está por llegar, hacia finales de año, cuando suenen las campanas de boda.
Anteriormente, en el blog del editor:
Aprovechando este tricentenario del blog del editor, aprovechamos estas entradas para recuperar a modo de cápsula del tiempo algunas entradas similares de años más remotos. La distancia y la nostalgia de tiempos lejanos, supuestamente mejores, hoy nos lleva a 2017, 2014 y 2012.
Qué barbaridad la cantidad de material devuelto durante enero y febrero. Una locura (y siguiendo un poco la tónica de lo comentado la semana pasada). Menos mal que con nuestro ritmo de novedades se nota menos el impacto, pero incluso así, ha habido que reestructurar calendario para poder ajustarnos y poder hacer frente a todo lo que regresa de las librerías.
De momento ya han comenzado a llegarnos las novedades de febrero a la oficina y están quedando francamente bien. Hay un libro sobre series de TV que hemos traducido y que podría funcionar bien; es un riesgo alto debido al elevado coste de traducción, pero que creo que puede funcionar si lo movemos bien.
Por lo demás, seguimos estudiando proyectos que nos van llegando y vamos a todo tren con la línea de clásicos de tiras de prensa, con un ritmo de dos títulos al mes, aunque habrá algunos en los que incluso saldrán tres.
Parece que vamos a tener una chica en prácticas durante algo así como medio año. De ser así, podríamos derivarle parte del trabajo que se nos acumula, que no es poco.
Estamos yendo a toda prisa de cara a poder publicar todo lo pendiente en marzo y desatascar un poco la cosa. Eso puede hacer que nos encontremos con el orden de 12 novedades ese mes, como en los viejos tiempos.
Al distribuidor ha llegado “Modesto y Pompon”, y nos han dicho que ha quedado de maravilla. Creen que funcionará bien. Esperemos, porque los derechos no fueron baratos precisamente.
Las devoluciones de este mes nos están matando, han devuelto alrededor de 1500 tebeos; menos mal que nuestro fondo editorial aguanta y hemos colocado 2500, porque de lo contrario hubiera sido una verdadera sangría económica. La verdad es que siempre pasa igual con febrero, nuestra verdadera cuesta anual.
Una lástima esas cifras, porque de lo contrario me hubiera planteado pujar por “Paper Girls”, lo último de Brian K. Vaughan; la cifra ya va por 15.000 dólares. No he leído esta obra, pero si es como sus anteriores trabajos, valdrá la pena.
Por cierto, manejar el FaceBook de la empresa está siendo toda una experiencia. Estoy contento con el incremento brutal de visitas.
Nota histórica: Al final Paper Girls se fue a Planeta y el Facebook quedó en unas manos mejores que las mías (cómo cuesta lidiar con algunas de las personas que pueblan la redes; el ser humano es tan particular).
Pero claro, con tanto revisar manuscritos y material publicable no he podido percatarme de que podrían funcionar muy bien obras del estilo de Johan y Pirluit; obras juveniles con un punto de nostalgia que puedan llegar al público joven, a los lectores clásicos, a los que pretenden ofrecer a sus hijos las aventuras de los personajes con los que crecieron…
De modo que he contactado con Dargaud y compañía para ver si estaban libres los derechos de series como Los Hombrecitos, Natacha, Modesto y Pompón, Quena y el Sacramus, Los Casacas Azules, y porqué no, Spirou (y Bermudillo, aunque parece no haber mucha gente que lo conozca!!).
Sería genial podes sacar un integral al mes con material de este tipo, al margen de ser obras que me encantan, nos garantizaría una colección en la que sostenernos a lo largo de los años venideros.
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