Hace dos años, viernes 9 julio 2021
Semana marcada por toda una serie de errores que me han dejado un poco desmotivado.
Por un lado, un fallo de comunicación con un diseñador ha hecho que un tebeo que tenía que costar 35 euros haya salido por 30. Como ya estaba en distribución cuando nos hemos dado cuenta, no había nada que hacer. El caso es que supone perder alrededor de 1500-2000 euros.
Y por el otro, Henrik Tann ha estado a punto de no venir al Celsius. Por diversos motivos, se ha ido retrasando la emisión de su billete, lo que a la vista del alza de la incidencia de contagios de COVID a nivel europeo ha hecho que al final haya dicho que prefería no venir. He tenido que intervenir directamente y escribirle como editor, seguido de otro mensaje de Jorge Iván como organizador, para que dijera que le diéramos un día para pensar en ello. Hoy mismo, por fin, ha dicho que vendría. Lo hará 3 días en lugar de 5 y cambiando algunos detalles de los aeropuertos donde hace escalas. Pero viene.
Veremos cómo va el Celsius, en el que este año hemos puesto mucho esfuerzo e ilusión. Yo incluso iré unos días. Tendremos stand y bastantes autores firmando.
También hemos avanzado mucho en algunos aspectos de los tebeos de Esther. Aneke se confirma como dibujante (ha quedado este miércoles a cenar con Portela, el guionista de la serie) y Paco Ortega, hijo de Purita, ha localizado materiales de reproducción que nos permitirán y trabajar en la continuación de las aventuras clásicas desde donde Glénat lo dejó. Llevaba meses intentando comprar las revistas inglesas donde salió publicado, pero no había manera, e iba camino de ser un trabajo arduo, complicado y quirúrgico.
Anteriormente, en el blog del editor:
Aprovechando este tricentenario del blog del editor, aprovechamos estas entradas para recuperar a modo de cápsula del tiempo algunas entradas similares de años más remotos. La distancia y la nostalgia de tiempos lejanos, supuestamente mejores, hoy nos lleva a 2020, 2019 y 2014.
Más buenas noticias ya que la mudanza es algo inminente. Hemos incluso gastado presupuesto en pulir los suelos de mármol del lugar, y ha quedado espectacular. Queda que Ikea traiga los muebles y el electricista coloque algunos enchufes y apliques nuevos (y la mudanza en sí, claro; casi nada).
Por lo demás, el miércoles llamé a nuestro distribuidor para que me informara de los pedidos de la nueva revista Dolmen y potenciar por mi cuenta las solicitudes de ejemplares a las librerías, llamándolas e intentando que vieran la importancia del relanzamiento. Pues bien, me han desaconsejado hacerlo ya que los pedidos que hay exceden la tirada realizada en casi 1000 ejemplares, y eso que habíamos triplicado la habitual. La sensación que he tenido ha sido de lo más agradable, de las mejores en mucho tiempo. Es muy satisfactorio ver que tanto trabajo redunda en algo tan positivo, y que la gente apoya una iniciativa de este estilo.
También hemos lanzado el calendario semestral de la línea Fuera Borda con los nuevos títulos. Ha habido cambios debido al parón del Covid19, pero a pesar de ello la recepción ha sido magnífica y la gente está encantada.
Esta ha sido la primera Metropoli Comicon a la que acudía, aunque hemos tenido stand en cuatro ocasiones anteriores. Y la verdad es que como evento global es maravilloso, sobre todo porque a nivel de ocio, espectáculo y cultura consiguen una combinación bastante buena.
Aun así, hay cosas mejorables (y eso que acuden del orden de 350.000 personas en unos 10 días). Principalmente porque, desde mi punto de vista, se centran más en cosas como la oferta de conciertos y dejan un poco de lado los cómics, siendo algo anecdótico. Y creo que en ese aspecto deberían de buscar a alguien que se dedicara únicamente a atraer al público de cómic que existe en Asturias.
Y es que daba mucha pena ver las pobres colas de autores como Chaykin, Saviuk, Kesel o Grummett, leyendas del mundo del comic.
Semana marcada por las malas ventas del pasado mes de junio. En vez de los 60-65.000 euros previstos hemos facturado 16.000. ¿Motivos? Dos o tres obras que no han salido a tiempo y, sobre todo, la gran cantidad de devoluciones que han llevado a cabo las librerías a lo largo del mes.
Llega junio, hay que pagar las compras de mayo del salón del comic de Barcelona y deciden devolver todo el material posible para de esa forma recuperar liquidez. ¿Consecuencias? Han devuelto la nada despreciable cantidad de 3.788 comics por valor de más de 66.000 euros.
Imagino que para el resto de editoriales estarán igual, por lo que no quiero ni pensar el traje que nos han hecho a todos. En el fondo todos somos culpables del sistema, que hace que prevalezca el valor de las novedades frente al material de fondo, aunque nosotros, precisamente, intentamos cuidar el fondo, pero ni por esas.
Todo ha hecho que el objetivo principal de la semana que viene sea el de intentar generar 10.000 euros como sea, mediante saldos y similares, para intentar conseguir algo de caja que nos ayude a pasar las duras semanas que tenemos frente a nosotros.
Nota histórica: Al final ese fatídico julio 2016 pasó y la cosa fue bien. Curiosamente, el pasado mes de junio de 2018 fue muy diferente al de hace dos años. Las novedades funcionaron y, además, el fondo editorial, que hizo que las ventas en general fueran especialmente buenas. Algo debimos de aprender durante los dos últimos años.
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