No es porque fuera un zombie, sino porque no me esperaba ver a nadie y ahí estaba él, de pie en medio de la oscuridad del despacho.

La verdad es que ha quedado bien, aunque un poco bajo para mi gusto (me lo maginaba más grande y todo). De todas formas, creo que cumplirá con su finalidad y nos permitirá dar un paso más adelante en lo que a exposición se refiere en librerías generalistas, y en que conozcan nuestra editorial. Desde luego ha sido una inversión bastante grande ya que este tipo de cosas no son precisamente baratas.

El tiempo dirá.